A veces pinto de azul,
el cielo tras mi ventana,
cuando hay tormenta tan gris
que rompe las madrugadas.
Imagino sonrisas en labios
que son secas fontanas
e intento mirar a la luz
que deslumbra cruel mi cara.
A veces sueño despierta
y al despertar de mañana,
rodean mi alma desnuda
sombrías ropas de escarcha
provocando tal frío en mi vida
que sus tristes harapos engañan.
Y el azul del cielo gris
se rompe tras la ventana,
los labios rojos se quiebran
al besar la madrugada
mientras recorro unos ojos sinceros
su dulce luz me regalan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tus palabras son la sangre que corre por las venas de este blog. Así que dale vida.